Ha pasado mucho tiempo desde que subí una entrada, acabo de terminar de leer la anterior... como siempre, algunas cosas han cambiado, otras no.
Dentro de las cosas que siguen igual, cuenta el que sigo sin trabajo, al menos en mi oficio, porque intento sobrevivir cantando en eventos y llevando la administración de la empresa de mi novio, es una empresa pequeña, algo que acá en Chile llaman Pyme; sin embargo, entre ambas cosas no alcanzo a hacerme un sueldo mínimo y mis gastos no han disminuido hasta ese punto.
Respecto de las cosas que sí han cambiado, la más importante de todas es que: AL FIN TENGO EDITORIAL!!!! aunque el costo de producción de los libros debo costearlo yo... era eso o esperar al menos año y medio más para publicar... pese a esto, debo decir que logré algo importante y difícil en mi país, tal vez en otros lugares sea mucho más fácil, pero claramente no es la realidad de Chile.
Dentro de toda esta aventura, hay cosas que no planeé y que surgieron en el camino, una de ellas es que no tendré el pseudónimo de escritora que había elegido, por un tema de "marketing" (odio eso, aunque siendo realista, hay que ayudarse con todo lo que se tenga a mano). Al parecer, es mucho más interesante D.Raiman, que Amelie Reimann, por una cuestión cultural más que nada.
Explicando: Mi verdadero nombre es Daniela Amalia Raiman González, entonces ¿Porqué buscar un nombre tan siutico (RAE: Dicho de una persona que presume de fina y elegante, o que procura imitar en sus costumbres o modales a las clases más elevadas de la sociedad)?. Bueno, hay varios motivos, el primero y más importante para mi, es que es una forma de poner distancia entre lo que escribo y quién soy (algo así como la persona y el escritor).
Pero ¿Porqué? Porque me ayuda a mantener los límites emocionales necesarios; como Daniela, llevo sobre mi una serie de valores y creencias que limitan mi yo creativo, pero que al mismo tiempo moldean la persona que soy día a día... no sé porqué ocurre esto pero sólo sé que es así, entonces, lo más sencillo era colocarme un manto y siendo "otra", dar libertad a mi yo creativo, puesto que el arte es libre, simbólico y no necesariamente refleja con exactitud lo que el resto cree, sin embargo, no todos están conscientes de esto.
¿Y qué importa lo que diga el resto? La verdad es que nada, pero dentro de ese grupo hay algunos a quienes amo y lo que menos quisiera es lastimarlos o confundirlos con las cosas que escribo (miembros de mi familia en particular... somos un grupo bastante tradicional).
¿Porqué Amelie? Porque nunca me he sentido cómoda con Amalia (el nombre que escogió mi papá biológico para mi, que sin querer queriendo, define muchos rasgos de mi personalidad "amorosa, tierna y débil" (según mis más cercanos); y al mismo tiempo "enérgica y activa"). Entonces, busqué una escritura más extravagante para reconciliarme con él... después de todo, nuestros nombres nos definen, nos guste o no. Fue así como llegué a Amelia (mi nombre Sturbucks xD), que luego se transformó en Amelie, porque evoca en mi un profundo sentimiento de ternura.
¿Reimann? ¿Really? xD... bueno, esto es un poco más largo de explicar, sucede que mi apellido es de ascendencia mapuche y yo nunca me he sentido parte de esa cultura... no es que sienta vergüenza, con lo que muchos me hicieron Bullying en el colegio; mas bien siento que es como jactarse de algo a lo que no me siento unida... nunca fui cercana a la familia de mi papá biológico, no se nada (más que el resto) sobre la cultura araucana, desconozco las costumbres, las fechas importantes y aunque amo el campo, los árboles y la vegetación, no sé nada sobre las comidas típicas y mucho menos "mapudungun"... entonces, inflar el pecho y decir: tengo sangre araucana en las venas (como la mayoría de los chilenos) me suena a algo irreal, casi oportunista. Por otro lado, Reimann en alemán significa "Hombre de luz", que ha sido lo que siempre me ha hecho falta...
¿No crees que es algo rebuscado? No, como escritora, no puedo evitar que mis personajes lleven un nombre que los defina: Damián (Domador, le gusta llevar el control de las cosas que dependen de él, lleva muy mal las improvisaciones), Diego (El Sabio), etc. En mi caso, como autora, es lo mismo.
En fin, por ahora seré D.Raiman, aunque para mi yo creativo seguiré siendo Amelie, tal vez, algún día pueda llegar a donde anhelo con el nombre que había elegido para mi.
Otra cosa que no estaba planeada es que mi libro tendrá que ser dividido en dos partes, porque es demasiado largo, tanto, que en un formato de libro normal, quedaba en aproximadamente 750 páginas; y las imprentas, para alguien con recursos limitados y desconocida como yo, no imprimen libros con más de 350 páginas. Tampoco es que sea muy rentable, dejaría al producto final en un precio impagable, sin mencionar que mi país no tiene cultura en lectura ni interés en promoverla, además de tener el impuesto sobre los libros, más caro de latinoamérica (19%). En compensación a lo anterior, incluiré ilustraciones hechas por mi (porque soy como la mujer orquesta pero no limitado a la música; es decir, dibujo, pinto, escribo, etc.) para ofrecer algo distinto a lo que hace el resto (distinto, no original).
En conclusión, de todo lo difícil que proyecté este camino, es mil veces peor xD... la tentación de abandonarlo todo y regresar a la banca, es grande... parece un idilio a la distancia desde donde estoy yo... buscando qué hacer mientras, para pagar mis cuentas y seguir adelante. Tomé muchos resguardos antes de saltar al vacío, sin embargo, al igual que "los cambios que hubo que aplicar al diseño original" acerca de el primer libro, no fueron suficientes. Pero seguiré adelante (es lo que escribo en cada entrada), aún cuando mi corazón a veces diga que ya es suficiente, que ya tengo un contrato editorial, que tengo la certeza de que mi novela será publicada ¿Qué más quieres Amelie?.
Quiero que mis libros sean hechos película, quiero vivir de la escritura para tener todo el tiempo del mundo para cantar con libertad, quiero comprobar que no soy diferente ni "especial" al resto de las personas que cumplieron sus sueños... que con ayuda de Dios, puedo alcanzar los míos y ser feliz con ello... aunque ya lo soy. Ansiosa en ocasiones, muy preocupada en otras, como cuando no sé como he de pagar mi dividendo... pero feliz en el fondo de todo aquello.
Amelie
PD: ¿Porqué no mandas a freír monos a quién te cambió el nombre de escritora? Porque esa persona es mi Editor, y como dice James Dashner, el Editor siempre tiene la razón... Se debe aprender a confiar en las personas que llevan más que uno en esto, lo que no es fácil para una "mujer orquesta" (que hace todo ella misma) como yo... lo importante es que el primer paso ya fue dado y ahora me toca dibujar... pronto les iré presentando a los personajes de mi novela :3!
